23 de abril de 2012

Un poema medio inventado (Charles Bukowski por Julieta Mortati)

en el original: "an almost made up poem"



te veo tomando agua de un bebedero con tus manos
azules delicadas, no, tus manos no son delicadas
son chiquitas, y el bebedero está en Francia
desde donde me escribiste el último mail y
te contesté pero no volví a escuchar de vos.
solías escribir poemas dementes sobre
ACTRICES Y MODELOS, todas seres de luz,
y conocías un montón de famosas y la mayoría de ellas
fueron tus amantes, y te respondí el mail, está bien,
adelante, entra en sus vidas, no soy celosa
total nunca nos conocimos. casi que nos cruzamos
una vez en un cumpleaños, había pizza y cerveza,
pero no nos vimos, nunca nos tocamos. entonces
te fuiste con las famosas y escribiste
sobre las famosas, y, claro, de lo que te diste cuenta
es que las famosas están preocupadas por
su fama -y no del loco amante que duerme con ellas,
que las toca así y asá, y que después se levanta bien
temprano a la mañana a escribir luminosos poemas sobre
ACTRICES Y MODELOS, sabemos que dios está muerto, nos
lo dijeron, pero cuando te escuché a vos no estaba segura. capaz
era un tema de gente VIP. Vos eras uno
de los mejores poetas del momento y se lo dije al sensei, también
a otros poetas, “sus, sus versos, está loco pero es
mágico. No hay mentira en su fuego.” Te quise como una
chica quiere a un chico que no conoce, que sólo
lee, que sólo imagina cómo será. Te hubiera podido
querer más si me hubieras dejado esperarte en tu living
mientras meabas con la puerta abierta -piiishhh-
pero eso no sucedió. Tus mensajes de texto fueron
cada vez más tristes: “yo no soy un chico bueno
para estar. No soy ese chico alegre”, me escribiste.
te rompieron el corazón. Che, te dije, a todos nos rompen
el corazón. Y no ayudó. Me dijiste que tenías un banquito
para ir a llorar y que ese banquito quedaba al lado de un puente
y que el puente estaba sobre el río y que te sentabas ahí a llorar
todas las noches por las chicas que te lastimaron y te olvidaron.
Te respondí ese mail pero nunca más supe de vos.
Un amigo me contó de tu suicidio tres o cuatro meses
después de que te tiraras al mar. Si hubiéramos estado juntos
probablemente te habría engañado con otros chicos y vos
con otras chicas. Fue mejor así.


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